Reseña: Blanca como la nieve, roja como la sangre de Alessandro D'Avenia

Antes de empezar la reseña, quiero comentar que esta entrada está "automatizada". Es la primera vez que pruebo de hacerlo, a ver como queda. Bueno, os digo esto porque este fin de semana estaré de vacaciones, ya que me voy a Donosti, y no podré estar atenta ni a mi blog ni a los vuestros. Aún así, he programado esta entrada y una para el lunes que espero que os gusten. Ahora sí, a disfrutar de la reseña:

Este libro lo conocí por una recomendación de un amigo, Deus (bueno, yo lo llamo así, ¿vale? jaja). Al haberme recomendado ya anteriormente un libro que me gustó mucho, Feed (click para leer la reseña), me fié de su criterio y en cuanto encontré el libro, no dudé en hacerme con él. Además, a un precio muy rebajado (dios, adoro las tiendas de segunda mano). Así que después de la cansada lectura de Las horas distantes, me apetecía algo más finito y fresco y lo empecé, sin expectativa alguna (sobretodo por que no ponía nada en la contraportada que me diera alguna pista). Antes de empezar la reseña, pero, tengo que comentar que este libro, por lo que he visto en La casa del libro, está descatalogado, pero en Amazon lo he visto por el precio puesto en los datos. Seguro que por segunda mano lo encontráis más asequible. Y ahora sí, vayamos a por los misterios que nos guarda D'Avenia con su libro.

Leo es un adolescente como cualquiera otro, un estudiante de primero de bachiller en un instituto italiano que podría ser cualquier otro. Tiene su mejor amigo, su mejor amiga, los profesores pesados, unos padres que no lo comprenden y un objeto de deseo con un largo pelo rojo y unos ojos verdes como la esperanza. Tiene hasta un enemigo, el color blanco, al que culpa de la nada, el silencio y la ausencia de todo. Pero en el momento en que su profesora es substituida por un profesor que ama su profesión, al que Leo llamará Soñador, las reflexiones que este aporta a la clase empezaran a calar fondo en el propio Leo, quien verá como su mundo se derrumba ante los colores, cuando el blanco que tanto odia empieza a recorrer el cuerpo de Beatrice, su enamorada. 

Como veis, por esta sinopsis, es un libro que puede parecer tópico, sencillo y aburrido. Y la verdad es que en un inicio, me ha dado esa sensación, un libro más de adolescentes que pese a estar escrito con una pluma ágil, sencilla pero inteligente, una pluma de esas que saben encontrar las palabras en el momento adecuado, no me parecía que fuera un libro que pudiera llamar la atención a nadie. Otro más de adolescentes y sus problemas. Craso error. 

Lo que más llama la atención del libro, además de que Alessandro cada vez se expresa con más maestría hasta que te llegas a enamorar de su pluma, es que es una novela plagada de colores, colores que realmente ves. El blanco es silencio, es miedo, es la nada, pero el rojo es la pasión, el amor, la improvisación. Leo quiere ser rojo como Beatrice, quiere vivir una historia de amor y pasar por la vida sin cuestionarse nada. Y no es hasta que llega el profesor (Soñador, como él le llama) que al más puro estilo Club de los poetas muertos, Leo empieza a entender la vida.

Me ha gustado mucho poder ver esta evolución en el personaje principal, poder contemplar todas las reflexiones de Leo que van haciéndolo madurar y poder crecer con él. El paso de la adolescencia a la adultez no pasa en un día y esta novela relata los principios de ese momento, usando los colores para expresar sus emociones. Es un libro reflexivo, pero no por eso se lee lento, al contrario. Yo al menos me lo he leído en un día, devorado más bien, por que a cada página que leía, más me gustaba la historia, la novela, Leo, Beatrice, Silvia y el Soñador. Y aunque el final me ha dejado un poco con ganas de más, en general la trama avanza con un ritmo natural y atractivo.

Con ciertas reminiscencias a las emociones que me transmitió El guardián entre el centeno, esta novela te hace vibrar, reír y llorar a la vez, te hace sentir con la emoción de los colores. Alessandro D'Avenia demuestra que la literatura juvenil también puede ser de calidad con este libro. Y ya, la pregunta del milión. ¿Lo recomiendo? Si aún no os ha quedado claro que me ha encantado, sí, lo recomiendo. A todo aquel que le guste la literatura de calidad y reflexiva, le gustará el libro.

4/5