Reseña: El juego de Ender de Orson Scott Card

La mayoría de libros de ciencia ficción que he visto de buena calidad tienen varias lecturas, varias capas de lectura en la que el lector puede profundizar tanto como quiera. Así, vemos que Hyperion de Dan Simmons, o La fundación de Isaac Asimov, son libros que tienen muchos niveles de comprensión y todos son interesantes. El lector llega tan lejos como él quiera llegar. En El juego de Ender me ha pasado algo similar, aunque quizá no tan claramente como los otros dos. Hacía tiempo que tenía curiosidad por este libro y aprovechando mi actual antojo de ciencia ficción, he decidido descubrir por fin este libro. La verdad es que no me arrepiento.

Después de las dos guerras contra los insectores, seres alienígenas que llegaron hace sesenta años a la Tierra para conquistarla, los humanos saben que ganaron por poco y han estado perfeccionando su ejército. Con una población limitada a dos hijos por pareja, Ender, el Tercero de la familia, tiene una infancia difícil. Su hermano Peter no deja de amenazarlo y solo el monitor que controla todo lo que ve y siente, en su nuca, lo protege. La raza humana se está preparando para una nueva guerra y en ella, serán los niños los comandantes de este gran ejército.

En este libro, la guerra no es tan importante como la formación de Ender como comandante y líder. En todo momento podemos ver como se desarrolla la personalidad de un niño como Ender, presionado para que saque lo mejor de él en estrategia de combate. Lo que empieza siendo un juego, un juego que Ender controla muy bien, va degenerándose cada vez más. En todo momento, los insectores son entes invisibles, un enemigo que ni Ender ni la humanidad puede ver, pero que siente el miedo a su aparición como base para la sociedad.

Aún así, el libro tiene otra capa, otra faceta más profunda. Al ver la vida de un niño que va creciendo, podemos conocer la personalidad de Ender mejor que la de cualquier otro. Conocer sus miedos, sus ambiciones. Es un libro sobre personajes y Ender es el personaje estrella. Pese a que a mi me pareció algo exagerada su capacidad y también me pareció que le daban una voz demasiado adulta a un niño que empieza teniendo seis años - así como a sus hermanos de doce y catorce -, el personaje en sí está muy bien creado. Me ha gustado sobretodo ese miedo a ser una persona que no quiere ser y como intenta combatir contra su propia naturaleza. También es interesante el debate que genera el libro, de los límites a los que un ser humano puede llevar a otro por el bien de la humanidad. No diré más para que lo descubráis si leéis el libro, pero como he dicho, esta novela tiene varias capas de profundidad y os podéis quedar en la que queráis.

A mi parecer, el final está algo precipitado, aunque es interesante como Card juega con lo que sabes y lo que no y como va trazando la historia a través de los misteriosos insectores. Y aunque todo el libro está rodeado de elementos futuristas y de ciencia ficción, es una obra muy humana. La pluma de Orson es sencilla, pero impactante, hace llegar la voz de sus personajes y de la historia que quiere crear con fuerza. Se premia antes la utilidad del lenguaje que la belleza, pero eso le da más fuerza a la novela.

En sí, es un libro que me ha gustado bastante. Como digo siempre, cada libro tiene su momento y seguramente para mi este era el momento de leer El juego de Ender. He descubierto, por eso, que el autor siguió escribiendo sobre el mundo creado y hay muchos más libros de esta "saga" que empezó siendo un relato corto. No sé si los leeré, porque el libro me ha llenado suficiente, pero nunca se sabe. Si os gustan los libros de ciencia ficción u os parece interesante ver la formación de un comandante a través de la mente de un niño, este libro seguramente os gustará.

4/5