Reseña: Un hombre en la oscuridad de Paul Auster

Hace meses compré este libro con la curiosidad de aquel que se enfrenta a un nuevo autor del que ha oído mucho. Aunque me gusta más la novela clásica que la contemporánea, es verdad que leo mucho autor contemporáneo. Y aún no había leído a Auster, lo que me parecía un crimen. Aún me queda mucho de su obra para tener una opinión global, pero sí puedo decir que con este libro me ha encantado.

August Brill observa la oscuridad nocturna sin poder dormir. Sufre de insomnio y desde que ha sufrido el accidente que lo ha dejado inválido de una pierna, sufre ese insomnio en casa de su hija. Para combatir el tedio de la noche en blanco, se inventa historias, pues es la única manera de no pensar, de no recordar el dolor que atenaza la casa de la familia de Brill, donde él, su hija y su nieta intentan recomponer las piezas rotas de su ser.

Me parece muy curioso que la mayoría de resúmenes que he leído del libro hablen, dándole mucha importancia, de la historia que August Brill inventa. Por supuesto, esta historia forma parte del libro, haciendo que este sea dinámico, que tenga varias capas, pero es solo una impresión de la realidad que crea el propio August. La novela se pliega sobre si misma y nos muestra dos historias que parece que se rozan, que tienen mucho que ver y a la vez, muy poco.

Y Paul Auster hace esto con una magistralidad sorprendente. Logra adentrarte en ambas historias, hacer que confluyan de forma natural sin que una se pierda en la otra. El lector se ve absorbido tanto en la historia que inventa August, sobre Owen Brick, el hombre que aparece en un agujero en la tierra en medio de una guerra y la propia vida del autor, que va rememorando en pedazos de recuerdos.

El libro está muy bien conseguido y es una novela corta, pero intensa. No necesita más ni necesita menos, sino que está acabada con un punto y final que deja satisfecho al lector. Los personajes, la historia, todo está bien construido y bien pensado, como si fueran naipes que van apilándose en un castillo. Sin que este se desmorone.

La pluma de Auster es ágil, ligera, pero elaborada a su vez. No es muy recargada, pero aún así se hace fácil y agradable de leer. La impresión de hecho es más bien la de estar leyendo un gran escritor que necesita poco para decir mucho. Es una lectura rápida, pero aún así muy introspectiva.

En conclusión, un libro que merece la pena ser leído. Y si no os animáis con Un hombre en la oscuridad, Paul Auster tiene una larga bibliografía que, creo, merece la pena descubrir. Así que no sé a qué estáis esperando... Un hombre en la oscuridad (y, seguramente, la mayoría de libros de Auster) valen bastante la pena.

4/5