Que me encanta hacer estas entradas es algo indiscutible. Es la sección del blog que más me gusta a mi y que más os gusta a vosotros y eso se nota mucho. Sin embargo, ya lo he confesado muchas veces, el dulce no me apasiona. Me encanta cocinar repostería y cuando las cosas quedan bien y bonitas, me alegro un montón. Ver a alguien disfrutando de un postre que yo he cocinado me alegra el día, sin embargo yo nunca como. O casi nunca. Porque la receta que os traigo hoy es de los pocos postres que me comería y querría repetir. Absolutamente delicioso.
Además, es la primera vez que lo hago y me queda tan bien. Los bundt cakes son una de mis asignaturas pendientes y no suelen quedarme bien: Muchos quedan como apelmazados y sin casi aire, así que son demasiado densos para comer. En el peor de los casos, al desmoldarlo se me destroza y la forma bonita que, representa, tienen que tener, se destroza por completo. Es una lástima, porque ahora sé que si los haces bien quedan bonitos y, sobretodo, buenísimos. Ya sabéis que no soy una fanática del chocolate ni del dulce, pero tengo que reconocer que este bundt cake me ha quedado de infarto. Así que apuntaros la receta, porque esta vale realmente la pena.
Pero como siempre, antes de hablaros de la deliciosa receta que os traigo hoy (no voy a parar de insistir en lo buena que está, ya conocéis lo pesada que puedo llegar a ser), quiero hablaros del libro. Y del porqué de esta unión que a primera vista puede parecer un tanto extraña. La soledad de los números primos es de esos libros que, si no habéis leído, ya podéis estar buscando en vuestra librería o biblioteca más cercana. ¿Por qué lo digo? Es un libro muy introspectivo, pero de esos que tocan muy adentro. No sé si sabéis la clase de libros a los que me refiero, pero los libros de Giordano me llegan muy adentro. ¿Habéis leído a Zusak? Es una sensación similar que la que tuve leyendo La ladrona de libros o Cartas cruzadas.
Estamos hablando de un libro muy intenso y a la vez, con un sabor bastante amargo. La dulzura se pierde con la amargura de la soledad que sufren los dos personajes. Es exactamente el sabor del chocolate, amargo pero a la vez dulce, pues aunque el libro esté cargado de melancolía, creo que también deja una sensación algo dulce. Este contraste me gusta mucho en el chocolate (aunque tengo que reconocer que acaba cansando) y es un sabor que está muy presente tanto en el bundt cake como en la novela. ¿No os parece la fusión ideal? Puedo imaginarme perfectamente leyendo este libro y comiendo un trocito del pastel.
Ahora sí, a la receta. Es una receta mucho más fácil de hacer de lo que parece. ¿El problema? Se necesita un molde especial de bundt cake. Podéis encontrar moldes baratitos de este tipo, sobretodo fijaos que tengan un agujero en medio, porque se necesita esta forma para que el pastel se haga totalmente (sino, quedará muy poco hecho por dentro y será asqueroso. Esta forma logra la consistencia ideal y os aseguro que no solo quedan muy bonitos, sino también muy buenos. Ahora sí, a por la receta:
Ingredientes:
225 ml de aceite de girasol (o un aceite de oliva suave)
100 gr de azúcar blanco
100 gr de azúcar moreno
200 ml de leche + una cucharada de zumo de limón
una cucharada y media de levadura
300 gr de harina
4 huevos
250 gr de chocolate derretido al baño maria
Preparación:
Antes de explicaros el proceder de este pastel, os tengo que hablar un poco de los bundt cakes. Los bundt cakes son pasteles en los que el molde tiene vital importancia, pues como podéis ver, tiene un agujero en el medio para mejorar notablemente la cocción. Un añadido además es que suelen tener formas preciosas y si se hace bien, al desmoldarlo queda tan bonito como en la foto. Si no tenéis un molde de bundt cake, igualmente podéis hacer esta receta, porque de verdad, está buenísima.
Empezamos añadiendo el zumo de limón a nuestra leche para que se haga buttermilk y poniendo el chocolate a derretirse al baño maría. Nos interesa que se derrita bien sin quemarse, por eso no lo hacemos en el microondas, pero si no tenéis más remedio, tened mucho cuidado a la hora de derretirlo, porque se os puede quemar muy fácilmente.
En un bol, añadimos el aceite y los dos tipos de azúcar y removemos bien (mi recomendación es que lo hagáis sin batidora, es decir, manualmente, porque sino podéis sobrebatir la masa y no os va a quedar bien el pastel). Añadimos entonces los huevos y batimos otra vez hasta que se integre (ya veréis que aunque lo estéis haciendo manualmente, la masa se integra muy fácilmente). Es el turno de la harina, que añadiremos en tres rondas: 100 gramos cada una, mezclamos bien y entonces, añadimos un poco de la buttermilk. Repetimos el proceso hasta que no quede ni buttermilk ni harina. Durante este proceso, añadimos también la levadura. Al hacerlo de esta manera, nos va a quedar una masa homogénea batiendo muy poco. Como toque final, añadimos el chocolate ya desecho y, si queréis, un chorrito de esencia de vainilla para darle aún más sabor.
Engrasamos bien el molde, primero con mantequilla o margarina y luego con harina. Añadimos la masa y ponemos el pastel al horno a 180 grados. Tardará una hora o así en hornearse, así que id vigilando la masa y pinchando el pastel de vez en cuando hasta que el palillo salga limpio. Si usáis un molde de bundt cake, al sacarlo del horno tendréis que esperar entre 10 y 15 minutos para desmoldarlo. Si lo hacéis en caliente, se os puede quedar parte de la masa enganchada al molde y eso arruinaría la forma preciosa que tienen estos moldes.
Y nada, hasta aquí la receta. Espero que os haya gustado este "Dime lo que comes" que ha tardado un poco en llegar.
¡Hola guapa!:D Vaya pintaza de receta :___ me has dejado con las ganas jajaj. El libro me lo recomendaron pero todavía no he podido leerlo ( ni probar a Zusak aunque ya he comprado sus libros jajaj) Me la llevo anotada , un beso^^
ResponderEliminar¡Hola!
EliminarPues espero que pruebes a hacer el pastel. En serio, ¡Es facilísimo! Y seguro que te gusta, tiene un sabor delicioso a chocolate fuerte :)
Yo siempre recomendaré a Giordano, me gusta mucho. Espero que te animes también con Zusak, por lo que he visto en los comentarios nadie los había comparado, pero a mi me parece que si te gusta uno, te va a gustar el otro seguro.
¡Un beso!
Hola!
ResponderEliminarMe encanta esta sección y me encanta La soledad de los número primos! Es un libro que me leí hace años pero que no dejo de recomendar!
Aunque la respostería no se me da nada bien, el pastel tiene unas pintas de muerte!! Que rico!!
Un beso!
¡Hola!
EliminarYo también lo leí hace años, pero me impresionó mucho y aunque la segunda novela de Giordano no me gustó tanto, tengo que reconocer que La soledad de los números primos tiene un hueco en mi corazoncito xD.
En serio que este pastel es facilísimo de hacer. No necesitas ni batidora. Solo un horno, molde y los ingredientes (todos muy asequibles de conseguir, además) ^^
¡Un beso! :D
AAAAAHHH, te odio ¬___¬. A mí el dulce tampoco me dice gran cosa, y el libro no lo he leído y tampoco me ha llamado nunca, pero ay, el chocolate me pierde, y al menos en la foto eso tiene una pinta que no se debería permitir a estas horas.
ResponderEliminarOdiame juju. Además, el pastel más que dulce, tiene ese toque amargo del chocolate, así que está realmente bueno xD. Yo también odio el dulce, así que si a mi me ha gustado y te gusta el chocolate, te gustaría el pastel xD.
Eliminar¡Un beso!
Pues mira, ahora que comentas lo de Zuzak y Giordano puede que sí. A mí, por lo menos, fueron dos historias que me dejaron el corazón hecho trocitos u.u
ResponderEliminarYo los bundt cakes los hago en un molde gigantesco de silicona, porque los metálicos terminan por quemarme toda la superficie del bizcocho (es que tengo un horno un poco peleón xD). Y también sin mantequilla \O/ Me apunto la receta porque, lo mismo son mis ojos, pero se ve super esponjoso. A ver si me animo con ella y te enseño el resultado :p
Yo creo que sí, tienen una similitud en cuanto a las emociones que me transmiten y las sensaciones que me dejan sus lecturas. No sé si seré yo o qué xD.
EliminarLos metálicos me gustan mucho más, son más rígidos y aunque cuesta mucho más que se desmolde bien sin romperse, me gusta más como queda. A mi lo que me pasa es que la harina se pega a la superficie del pastel y queda feucho, pero bueno, eso es quitarle la harina sobrante con un pañuelo o algo.
Es suuuuper esponjoso. Muy denso, eso también, pero queda delicioso :D
¡Un beso!
Se ve delicioso el pastel, como siempre. Aunque nunca he horneado uno de la clase que nos muestras, me he animado un poquitín :). En cuanto al libro de Giordano, aún lo tengo pendiente precisamente por eso, porque sé que puede llegar muy hondo en el lector.
ResponderEliminarSaludos, y como siempre, gracias por la entrada.
Bueno, la receta es buena para cualquier pastel, si quieres hacerlo con un molde normal. Lo que pasa es que los bundt cakes tienen la facilidad que se cocinan por todos los lados y además quedan preciosos, por eso mucha gente los prefiere a un bizcocho normal. Pero ya te digo que la receta está buena sea como sea y no es necesario el molde para disfrutarla :)
EliminarEste libro de Giordano me gustó mucho. No puedo decir lo mismo de El cuerpo humano, que aunque no me disgustó, no me llegó tan adentro como el otro.
¡Un beso!
Muero
ResponderEliminarde
hambre.
Apuntadísima esta receta, a ver si mi madre me ayuda un poco y la hacemos para tener algún dulce diferente estas navidades jajaj
El libro también apuntadísimo, conocía el título pero... bueno, no se de qué va, el que hayas dicho que te deja una sensación como Zusak simplemente no he dudado el meterlo de cabeza a la wishlist.
Si consigo hacer esta receta te mandaré una foto, a ver si queda tan bonito :P
Ya te digo, cualquier molde sirve para hacer la receta. La masa es lo que importa y te aseguro que está bueníssima <3.
EliminarEl libro creo que te puede gustar, a mi me encantó, es precioso. Diferente y especial, al menos cuando lo leí, me llegó muy adentro.
Espero esa foto! <3
¡Un beso!
Al libro le tengo muchas ganas, hace demasiado tiempo que lo tengo "en pendientes"
ResponderEliminaren cuanto al bundt cake.. no he hecho nunca uno, así que también está pendiente
es lo que dices.. que está el equilibrio entre la forma bonita, la esponjosidad y el gusto.. ya sabes que yo también soy de cítricos y sabores más "fuertes" y lo dulce me cansa, pero bueno, habrá que probar a ver... mis amigos seguro que están encantados si hago jajaaj
un beeeeeeesazo
¡Hola!
EliminarPues a ver si te animas, a mi el libro me encanta <3.
Hice un bundt cake de lemon curd que estaba aún más bueno que este (aunque para mi gusto, necesitaba aún más lemon curd xD), pero este está bueno igual. Tiene el toque amargo del chocolate que lo hace increíble.
¡Un beso! :D
El libro lo lei hace como 4 años y mi querido paolo es de mis italianos preferidos :D
ResponderEliminarSé que te encanta <3. Yo lo leí hace mucho también (creo que unos 6-7 años xD) y me encantó en su momento. ¡Que ganas de leer su nueva novela!
Eliminar¡un beso!
Buf.. un par de veces he empezado el libro... pero no he podido continuarlo. Quizá no he llegado a la parte que me enganche... no sé.
ResponderEliminarEse pastel tiene una pintaza!!!
Saludos
Bueno, es un libro que puede gustar o no, si no te llamó la atención es mejor no forzar. A veces no es el momento de leer un libro.
EliminarEl pastel es muy fácil de hacer, si algún día te animas ya verás que queda delicioso :)
¡Un beso!
Comparar a Giordano con Zusack? Nunca lo habia pensado, pero ahora que lo mencionas sí, se parecen mucho las sensaciones finales que dejan los libros de ambos >.< Nunca he probado este postre pero tiene buena pinta *^*
ResponderEliminarUn beso! ^^
Ya, yo lo pensé cuando leí a Zusak, pero veo que fui la única xD. No sé, las sensaciones que me transmiten son similares, al menos para mi.
Eliminar¡Un beso! :D