La literatura oriental (a excepción de la japonesa) está muy descuidada en nuestro país. Encontrar novelas traducidas del chino o del coreano es complicadísimo (y ya no voy a meterme en novelas vietnamitas, tailandesas o mongolas, por poner ejemplos), algo de lo que uno no se da cuenta hasta que empieza a indagar en ello. Llega un momento que cuando quieres conocer un poco mejor estas culturas literarias, agradeces cualquier recomendación interesante de libros que sí se han traducido (y más si tiene un título y una sinópsis tan atractivas como este libro). Así que cuando llegó el momento, me adentré con muchas ganas en esta novela.
Una madre desaparecida en la estación de metro de Seul. Unos hijos que han construido su vida alejados de su hogar, un hombre que es padre y marido pese a que no se siente ni lo uno ni lo otro. Estos son los protagonistas de esta novela, que a través de la búsqueda cada vez más desesperanzada de una mujer, van ahondando en sus recuerdos, en sus vivencias junto con esta mujer que van conociendo más cuanto más lejos están de encontrarla.
El libro está dividido en cuatro partes bien diferenciadas y en cada una de las partes un personaje coge el relevo narrador para mostrarnos desde su interior la situación. Con una acertada segunda persona (en dos de las partes) y una intimista primera persona en las otras dos, la autora nos acerca mucho a la realidad que viven los hijos y el marido durante la búsqueda y a su vez, nos adentra cada vez más en los recuerdos de estos.
Y de esta manera, de forma muy cercana e íntima, nos adentramos en los pensamientos y recuerdos de estos personajes. Y en ellos reside la fuerza de toda la narración, pues a medida que su desesperación crece, también van aprendido a ver lo que han perdido y dónde se han equivocado. Kyung-Sook Shin aprovecha también para hablar de un contraste generacional, de la historia del cambio en un país que pasó por una larga guerra para, poco a poco, modernizarse. Ese contraste generacional se ve sobretodo en la hija mayor, Chi-hon y la propia madre, dos mujeres que han aprendido a sobrevivir y a avanzar pese a ser tan diferente entre ellas. La madre, una mujer que ha crecido con valores tradicionales y que no ha salido apenas de su pueblo en toda su vida y Chi-hon, una escritora que ha volado por todo el mundo y que se ha alejado del camino tradicional de una mujer coreana. Ambos personajes tienen una fortaleza increíble y ahí está una de los mensajes más bonitos de la novela.
Aunque la segunda persona es muy acertada, para mi gusto ha sobrado el último capítulo, narrado desde el punto de vista de la propia madre. Y es que el personaje que se va construyendo a través de los recuerdos de la madre me parece más atractivo que leer la voz del propio personaje, pues podemos entrever los rasgos de su personalidad solo escrita a través de un tercer punto de vista. Esto se borra de un plumazo al introducir Kyung-Sook Shin la voz del a madre en la última parte.
Aún así, es una novela bien estructura y bien escrita, que no peca de dramatismo ni de exageración (pese a que, para mi gusto, la madre es demasiado fantástica para resultar creíble) y que se lee en un suspiro, aunque deja una sensación cálida en el corazón. Además es una novela fantástica para conocer un poco mejor la situación cultural de un país tan desconocido como Corea del Sud.
No había oído hablar de ella, pero con tu reseña me ha llamado la atención y la tendré en cuenta. ¡Un abrazo!
ResponderEliminarBuen día Isa!
ResponderEliminarPor ahora no he leído mucho sobre la literatura oriental. Me ha pasado de leer algunas poesías o fragmentos cuando iba al colegio pero aún no he comprado nada por placer.
Voy a estar atenta para próximas lecturas (=
Un beso grande
Nati
http://khaleesigeek.blogspot.com/
Precisamente ayer lo estuve ojeando en una librería, y me dije a mí mismo que tal vez la lea en un futuro. Por otra parte, considero lo mismo que tú; una vez uno quiere adentrarse en la literatura de otros países orientales, no encuentra casi nada, por no decir nada.
ResponderEliminarMuchas gracias por tu reseña, me has animado más a leerla :D.
A mí me gustó muchísimo. Sentí la temática muy cercana a pesar de ser una autora de una cultura, aparentemente, tan alejada de la nuestra. La relación entre la madre y sus hijos está estupendamente narrada. Un saludo.
ResponderEliminarLo tengo en la estantería esperando turno =)
ResponderEliminarBesotes
La editorial el Ermitaño, creo que es mexicana tiene alrededor de 20 libros de literatura coreana, tambien Verdum (española), yo he leido este libro... no completo, me molesta un poco la traducción, creo que eso daña la narrativa.
ResponderEliminarEsta es su obra mas famosa, tambien esta traducida una primavera helada.
La editorial el Ermitaño, creo que es mexicana tiene alrededor de 20 libros de literatura coreana, tambien Verdum (española), yo he leido este libro... no completo, me molesta un poco la traducción, creo que eso daña la narrativa.
ResponderEliminarEsta es su obra mas famosa, tambien esta traducida una primavera helada.